 Muchos hemos intentado correr para bajar de peso alguna vez, pero al no ser expertos en el campo, solo salimos por la mañana con la chamarra mas gruesa que tengamos y a correr se ha dicho, pensando que todo lo que sudemos va a ser grasa y que eso nos va a ayudar a bajar de peso de un solo golpe; pero resulta que hay una posibilidad de maximizar esta práctica, solo necesitabas ayuda de los maestros.
Te vamos a decir qué es lo que tienes que hacer para que tus rutinas de running de verdad den fruto y te ayuden a adelgazar mientras que también puedes fortalecer tus pulmones y tu resistencia física en general y los más importante, muchas de las cosas que debes tomar en cuenta son parte de la vida cotidiana y no necesariamente de la rutina de correr como tal. Hidrátate Si bien es cierto que a veces no bebes demasiada agua durante el running porque puede hasta revolver tu estómago si te llenas de la misma, es importante que bebas al menos dos litros de agua durante el resto del día, porque has perdido mucho líquido al correr y tu cuerpo es más del 75% agua, así que necesitas de ella para trabajar bien durante tu día entero y no solo en el ejercicio. No dejes de comer O en su defecto, no empieces a comer en menor cantidad de la que lo hacías comúnmente; mucha gente piensa que al empezar a correr también debe bajar su consumo de alimento y se equivoca, recuerda que de los alimentos recibes la energía, por consiguiente no es buena idea dejar de comer. Lo que debes dejar a un lado es lo comúnmente prohibido por sus grandes cantidades de grasa, es decir la comida chatarra, pero por lo demás no debes soporta hambre. También influye en subir de peso, que hagas muchos picoteos entre comidas, así que encárgate de que esos aperitivos entre comidas sean frutas y nada más. Descansa lo suficiente Para cerrar con broche de oro, debes recordar que necesitas recuperar la energía perdida y eso incluye no solo parar durante la rutina un minuto, sino que también dormir bien y no necesariamente salir todos los días, ya que tus músculos necesitan descanso; lo puedes hacer por ejemplo unas cuatro veces por semana entre 40 y 50 minutos cada una y será suficiente.
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